lunes, 15 de septiembre de 2008

Tristeza



Se despertó creyendose aun en sueños. Se calzó su par de nada y se vistió de sucio blanco. Pasó a la cocina pisando cristales y se sirvió 2000 lágrimas de desayuno, las mezcló con un poco de tierra y polvo y se alimentó de miseria para su nuevo día.
Salió a la calle con su cajita de equipaje, en ella guardaba 4 monedas de plata, una bebida caducada, un par de arapos, 200 dolores de pies, un tarrito de betún y 1001 ilusiones rotas. Se encaminó hacia el trabajo andando con la mirada en el cielo y el corazón en el suelo, sin más ocupación que el simple pensamiendo de porque su sentimiento estaba en otro lado, su pelo cardado y sin destreza, comprendió porque se llamaba Tristeza...


Gemma Fanjul

2 comentarios:

Holly Golightly dijo...

Siento mucho lo de tu abuelo, Gemma :(
Es que me enteré por la tarde. Lo siento.
Un besito.

Antonio Rico dijo...

Vaya, parece que hay malas noticias. Ya me extrañaba que no hubieras pasado algún día por el instituto. Un abrazo para ti y para tu hermano. Y a ver si reúnes ánimos para pasar durante algún recreo a despedirte de la vieja guardia que dejas atrás antes de marcharte a Madrid